Cómo salir de la crisis de isapres y habilitar la reforma a la salud
El objetivo del siguiente documento es describir la grave situación que atraviesa el sistema asegurador privado de salud en Chile y que podría llevar a una severa crisis sanitaria. Se analiza la efectividad de la ley corta enviada por el gobierno y se plantean directrices para contener una eventual crisis sanitaria y habilitar la necesaria y postergada reforma del sistema de salud.
La crisis del sistema asegurador privado de salud tiene múltiples causas, entre las que destaca su mal diseño que permitió que durante años las Isapres seleccionaran a los pacientes relativamente menos riesgosos mediante la discriminación por precio, la cobertura restringida y la exclusión. Lo anterior acompañado de una industria que se negó fuertemente a introducir cambios.
Ante este panorama, las Cortes debieron intervenir para ir solucionando los problemas del sistema e incluso el Poder Judicial realizó reiterados llamados a los otros poderes del Estado para que dieran una solución legislativa. Desgraciadamente, debido a la falta de acuerdos políticos, las reformas que se presentaron no se concretaron.
Hoy estamos ante un inminente colapso financiero del sistema asegurador privado de salud que podría desencadenar una grave crisis sanitaria. La crisis en la que ya se encontraba el sector se aceleró debido a un cuestionable fallo de la Corte Suprema y el proyecto de ley corta presentado por el gobierno no logra dar una solución al problema, imponiendo una deuda inabordable y reduciendo los ingresos futuros de las aseguradoras privadas.
El proyecto de ley corta crea una nueva modalidad de cobertura complementaria en Fonasa, donde los cotizantes pagarán una prima complementaria plana por beneficiario adicional al 7%, para tener acceso a mayor cobertura financiera en una red de prestadores privados vía seguros privados intermediados por Fonasa. No queda claro que esta nueva modalidad permita a los actuales beneficiarios de Isapre mantener su cobertura y la propuesta se construye sobre supuestos cuestionables lo que hace dudar de su viabilidad. El proyecto de ley tampoco contempla nuevos recursos para la salud pública.
