¿Dónde está el aumento del empleo público?

En nota publicada el domingo, el INE finalmente admite que los 94.140 empleos públicos creados en los últimos doce meses (trimestre ene-mar) sí son estadísticamente mayores a los de años anteriores. Así, mientras el empleo público crece a una tasa anual de 8,6%, el empleo privado lo hace apenas al 1,0%. Más allá de las causas de este significativo aumento –que requiere una explicación rápida, contundente y clara por parte de las autoridades– la discusión que se ha levantado el último mes sobre la veracidad de las cifras de empleo reportadas por el INE es, al menos, preocupante.

Primero, que el organismo público encargado de recabar las estadísticas oficiales de empleo de nuestro país tenga que desdecirse, es señal de una fragilidad institucional que daña la fe pública en datos sensibles y relevantes para el correcto diseño de políticas. No olvidemos que a fines de abril el mismo INE dijo que el alza del empleo público no era estadísticamente significativa, y que tanto el Ministro como la Subsecretaria de Hacienda salieron a respaldar esta tesis.

Segundo, en vez de estar observando la evolución del empleo a partir de encuestas, hoy podríamos estar viendo la variación mensual del empleo público con los datos administrativos que el Estado tiene. Esto gracias al artículo 70 de la Ley N°21.306 (vigente desde el 2020), que obliga a todos los órganos y servicios públicos, incluyendo municipios, universidades estatales y empresas públicas, a enviar mensualmente a la Dipres la nómina de sus trabajadores, incluyendo sus remuneraciones. Lamentablemente, a septiembre del 2022 menos de la mitad de los municipios reportaba esta información. Peor aún, al momento de solicitar por Ley de Transparencia a Dipres los datos actualizados a diciembre del 2022, recibimos una respuesta negativa aduciendo “problemas técnicos que mantiene la plataforma de captura de datos”.

Ojalá que Dipres o la misma Contraloría logren exigir que este artículo deje de ser letra muerta. Sin ir más lejos, nos permitiría resolver la pregunta de fondo, que todavía no tiene respuesta: ¿Dónde está el aumento del empleo público?

Esta carta fue publicada en El Mercurio.